Aldana: Es de carácter fuerte, honesta y entusiasta. Se interesa por todo y le gusta aprender cosas nuevas. Es también sensible y generosa con los demás. Se manifiesta en la expresión artística, las cosas del honor y las del humor. Ama el color y el ánimo alegre. Le gusta sentirse complementado. Es exigente. Se distingue por su delicadeza. Busca la aprobación. Es mente de pensamiento eficiente. Se expresa como pensador original. Podría destacar en profesiones como inventor, aviador, ingeniero, maestro, líder, administrador, o en los campos automotriz, aeronáutico o eléctrico. En el amor es orgullosa, por eso espera a que la otra persona dé el primer paso. Natali: Es simpática y dinámica. Le gusta triunfar en todo lo que hace. No le gusta la rutina y es muy creativa. Le gusta tener cerca a sus afectos. En el amor solamente es leal si se enamora de verdad.

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29 de septiembre de 2015


Yo esperaba que sea como en las películas “si tú no vas, yo tampoco”, me equivoque, es difícil decirlo, pero ya deje de creer en el príncipe azul que creí que eras. Hay que empezar todo otra vez, y capaz sea una cuestión de celos, pero me conoces muy bien y sabes que ciertas actitudes me molestan; pensé que eras diferente, que cuando me vieras mal harías todo lo posible por sacarme una sonrisa, que si me enojara, por más tonto que sea el enojo, no me dejarías en paz hasta que te perdone, que equivocada que estaba. Me decepcionaste una vez más. Que ingenua al creerte cuando me decías que cambiarías por mí. No lo hiciste, y al darme cuenta, volví a sufrir, esas malditas puntadas en el pecho, esas que tanto me duelen, y sabes muy bien que sólo aparecen cuando en verdad me lastiman, nunca hubiese pensado que vos me volverías a lastimar. Pero que voy a hacer, sin vos no puedo vivir. Odio que te ame tanto, y que a veces vos ni me lo demuestres, que me dejes ir cuando estoy mal. Perdón pero no nos veo juntos hasta el fin, prometiste dar todo por mí, e incluso hasta el día de hoy no vi nada tuyo. No creo poder decírtelo, espero que te des cuenta, tal vez el destino no nos quiere juntos; habrá que elegir otro camino. Desde el día de hoy no hay más esperanzas, se acaban de morir las pocas ilusiones que quedaban.


(Lo escribí hace tiempo, pero tuve la necesidad de publicarlo)


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